Hace unos tres años os comenté el desastre que significó el álbum Blow Up para nuestra banda de Nueva Jersey (➜ AQUÍ) y encima, fue lanzado tres minutos antes de que el grunge irrumpiera con toda su potencia y arrasara con todo lo que se le pusiera delante. No solo eso, esta nueva corriente alternativa representó un nuevo paradigma para las discográficas y eso significaba que tenían que hacer borrón y cuenta nueva y descartar a las bandas que a su parecer, ya no encajaban. Nuestros amigos fueron víctimas de estos mierdosos movimientos de marketing, además, con un álbum ya grabado que no aparecería hasta el 2022. No nos engañemos, Pat DiNizio y los suyos tienen unos parámetros más que reconocibles en rock y en pop, por eso fue tan desastroso elegir a Ed Stasium como productor y por extensión, su trabajo del 1991, porque se recreó en coordenadas recorridas mil veces. Y a pesar de las dificultades, lograron encontrar una nueva compañía, recuperaron a Don Dixon como productor que tan buen resultado les había proporcionado en el pasado. ¿Y qué salió de todo esto? Pues en mi opinión este álbum es lo mejor que parieron en los 90 y el tercero en mi ranking de preferidos de la trayectoria de esta banda, donde tenemos canciones más que memorables, donde no abundan los momentos flojos e incluso, hay dos temas bastante polémicos, ¡lo cual sí que es una novedad! Jugando un poco con el tiempo y especulando un poco, este trabajo lo deberían haber lanzado en 1990, porque es una continuación natural del Green Thoughts, qué le vamos a hacer. ¡Vamos allá, hagamos un repaso de las canciones! Sorprendentemente, para arrancar este trabajo recurren a un comienzo similar al 11, con temas potentes, en este caso son una triada: "War for My Mind", "Everything I Have Is Blue", "Miles from Nowhere". No están mal y tienen el estilo inconfundible de la banda de Nueva Jersey, yo me quedaría con el que va en segunda posición, me recuerda remotamente al "Only a Memory", aquí os dejo cómo la interpretaron en el programa de Jay Leno, donde la interpretan de forma fiable y contundente.
Everything I Have Is Blue - The Smithereens
El sencillo elegido para abrir fuego y a la postre, el único del álbum fue "Miles from Nowhere", para mí, una elección equivocada, no está mal, pero no tiene gancho, es imposible que se puedan romper listas haciendo lo mismo de siempre.
Miles from Nowhere - The Smithereens
"Afternoon Tea", uno de los puntos más bajos del álbum, recuerda demasiado a los temas lentos del 11 y el Blow Up, un corte totalmente prescindible. Por suerte y a partir de aquí es donde encontramos a los Smithereens de los grandes momentos, con "Point of No Return", tema de Jim Babjak, que nos muestra a una banda que sabe poner un estribillo, que sabe hacer un medio tiempo memorable, donde la maquinaria heredada de The Beatles funciona con precisión milimétrica.
Point of No Return - The Smithereens
Con "Sleep the Night Away", es un tema que transita con momentos rockeros y otros más lentos, con ese toque "swing" y a la vez pesado y potente. "Love is Gone" otro tema escrito por Jim Babjak, marca personalmente, el punto álgido del álbum, donde nuestros amigos dan una lección a todos los aspirantes a rockeros de cómo hacer un tema compacto, rockero e inolvidable y donde nos dicen que todo se ha vuelto violento y que algo tan necesario como el amor, se ha ido. ¡Magnífica, gigante!
Love is Gone - The Smithereens
Y se sigue con un tema bien firme como es "Long Way Back Again", con la recurrencia que Pat imprime en las letras con temas de desamor y desesperanza, donde siguen cimentando el álbum.
Long Way Back Again - The Smithereens
Llegamos a los puntos polémicos, primero, dedicando un tema al mafioso John Gotti y que ya comenté en un artículo (➜ AQUÍ). Yo creo que Pat no debería haberse metido en este embrollo de esta manera y menos, pedir la liberación de este señor. La otra tonada polémica es "Sick of Seattle", donde sin miramiento critican la escena grunge, puedo comprender a Pat, una situación que también ocurrió en los años 70 con las bandas consolidadas del rock y la irrupción del punk. Santa paciencia, Sr. DiNizio.
Sick of Seattle - The Smithereens
Y este álbum se remata con "Life Is So Beautiful", un tema con toda la carga de ironía en el título, describiendo las promesas rotas y entonando el "mea culpa" por los errores cometidos. Un tema lento, pero sólido, con una omnipresente armónica que va acompañando la tristeza del protagonista.
Life Is So Beautiful - The Smithereens
A pesar de las expectativas, este disco vendió poco y a la discográfica le faltó tiempo para despedirlos y de hecho, no volvieron a grabar hasta cinco años después, con un sello independiente. Por suerte para ellos y en el presente siglo, los fans, nunca los hemos olvidado y de giras siempre tuvieron y aún tienen, pero eso, ya es otra historia.
Tengo afecto a esta banda, iluminaron algunos pasajes en mi camino por los años 80 y me dolió mucho este álbum, para mí su peor disco, intentaré ser razonable, ecuánime, con ojos del siglo XXI y hacer una crítica lo más ajustada posible. Los Smithereens debutaron con dos álbumes más que notables como son Especially for You y Green Thoughts, álbumes con un evidente sabor retro, pero que en manos de un gigante de la producción como es Don Dixon pudo equilibrar toda la parte nostálgica y se hicieron unos álbumes que a ojos alternativos eran más que aceptables. Sólo decir que Kurt Cobain mientras trabajaba de transportista se empapó bien de todo el pop del Especially for You y que él mismo reconoció. Para mí las cosas se empezaron a torcer con el siguiente disco, 11. No es un mal álbum, pero aquí cambiaron de productor y empezaron a forzar toda su vertiente más pretérita y deudora. En efecto, los Smithereens son una banda de fans, unos fans acabados de los Beatles, de la British Invasion, de los Beach Boys, de la Motown, de todos los grandes nombres en el rock y en el pop de los 60 y 70 y me parece bien, pero para crear necesitas algo más que saberte todos los acordes que emplean los Rolling Stones. Y es cuando llegamos al disco que analizamos hoy y además, en unas fechas muy paradigmáticas, lo sé, utilizando el recurso del toro pasado, de ver las bandas, las fechas, los singles, todo lo que seguro que Mike Mesaros y los demás no olvidarían. Así pues, que es este disco? Pues es una mirada atrás, es querer ser un beach boy, un fab four, una ronette y no saber que la historia de la música estaba a punto de dar un giro de guión bien sonado. Se dejaron llevar por sus gustos y se vieron todas las costuras, todas sus influencias quedaban al descubierto y ojalá les hubiera servido, pero lo que pasó es que parecía una banda anclada en el pasado y la historia, inmisericorde, los pasaría por encima en cuestión de días. No ayudó nada el productor, el Ed Stasium, que quizá para otras bandas hubiera funcionado, pero en el caso de la banda de Jim Babjak fue muy contraproducente. Duele, porque el cantante y creador de casi todas las canciones como es Pat DiNizio es, era y sigue siendo todo corazón, con una voz muy especial, duele porque a la postre la banda ya no podría aspirar a más. Hacemos un poco de repaso de este trabajo. Todo lo que he dicho antes no puede empezar de manera más obvia, más esclarecedora como es la primera canción y el primer single, "Top of The Tops", un homenaje a los charts, a los temas que servían para atraer y para vender vinilos. Un tema que también es paradigmático, quiere ser mitad y mitad de rock y pop, con un estribillo pegajoso y repetitivo. Es incluso divertido, es como hornear un pastel para María Antonieta mientras las pescaderas revolucionarias ya están muy cerca de Versalles. O el mismo, un single que quiere ser rock, quiere ser surf, quiere ser pop y el resultado es bien escaso y se pierde por el camino.
Top of The Tops - The Smithereens
"Too Much Passion" es un homenaje al soul, también a las grandes orquestas al servicio de los crooners, pero que personalmente encuentro la canción muy intrascendente, con un estribillo sin emoción. Decían en la película "24 Hour Party People" que cuando una banda rockera se liaba a hacer jazz es que ya no tenían nada que decir y que musicalmente estaban sin norte y es lo que pasa con este segundo single, que hay un buen soporte instrumental pero no es un tema para lanzarlo como sencillo, es más bien un tema de relleno.
Too Much Passion - The Smithereens
"Tell Me When Did Things Go So Wrong" es un ejemplo perfecto de cómo el anterior álbum, 11, tuvo una descendencia nefasta. Rock en bruto, yendo a todo gas, con este punto en el que los Smithereens se saben manejar muy bien, que es hacer una canción pop con una buena pátina de rock, pero fallan, no la acaban de resolver bien, les da igual este tema, a los pocos minutos te olvidas que existe. Algo parecido ocurre con "Evening Dress", una canción que parece querer emular a "Blue Period" o "María Elena", tema que camina despacio y se hace eterna. Tenemos por fin, una canción que está muy bien realizada y que sin lugar a dudas habría sido un gran primer single y con éxito asegurado, es inexplicable la elección de tonadas para promocionar el álbum, porque "Get a Hold of My Heart" es un grandísimo tema, lo mejor de la cosecha del 1991 de los Smithereens. Reconozco que las veces que me he puesto a escuchar el Blow Up voy a piñón fijo y hasta hace muy poco no he descubierto toda la dimensión de esta canción. Coescrita junto con Diane Warren, tiene un sobresaliente soporte orquestal, extraordinariamente arreglada, con un gran trabajo en la voz de Pat DiNizio y el estribillo magnifico con la Diane y encima, esta composición tiene dos puentes, que no malogran en nada la composición, al contrario, la realzan. Escuchadla y decidme que pensáis.
Get a Hold of My Heart - The Smithereens
Donde en el anterior tema estaba todo acertado, en "Indigo Blues" hace aguas por todas partes. Sí que hay un magnífico trabajo con el órgano, con los vientos y el solo de Jim Babjak no está mal, pero todo lo demás es más que discutible, un estribillo que produce cansancio y encima es más que machacona, unos coros que no resultan y con una parte final confusa, es como si no hubieran encontrado la manera de terminarla. No sé si es de las peores composiciones del combo de New Jersey, pero seguro que nadie tiene demasiadas ganas de recordarla. "Now and Then", canción compuesta por Jim Babjak vuelve a pecar de todos los males de este disco, que se hace eterna, repetitiva y no acaban de coger el tono. "It 's Alright" otro tema que parece descartado de las sesiones del 11, suena potente, con un buen solo a cargo de Jim y los coros están acertados, pero no deja de ser el típico tema power pop de siempre, el puente no me convence, se hace demasiado largo y la canción se resiente. En cambio "Girl in Room 12" está bien resuelta, suena firme, compacta y con un ritmo imparable, con un buen trabajo con la guitarra y para mí es la segunda mejor canción del álbum.
Girl in Room 12 - The Smithereens
Llegamos al final con "If You Want the Sun to Shine", coescrita junto con Julian Lennon. Antes ya os he advertido de la querencia retro de nuestros amigos y aquí fueron muy lejos con sus filias y como habréis adivinado, aquí no se trata de que suene a Julian Lennon, se trata de ponerlo como excusa para que suene lo más Beatles posible. Yo creo que el hijo de John Lennon no sabía dónde se metía cuando Dennis Diken y compañía lo llamaron para grabar y se tendría que haber negado en redondo. Escucha y reflexionad.
If You Want the Sun to Shine - The Smithereens
Este disco fue un fracaso en comparación al resto de lanzamientos de esta banda y la compañía discográfica ya estaba preparando su salida después de los malos resultados de este trabajo. El Grunge llegó para quedarse, justo en 1991 y muchas bandas quedaron obsoletas ante el nacimiento de nuevas formaciones o las que aprovechaban la ola para hacer escalar las ventas. Este fue el caso de los Smithereens que quedaron descolgados, a pesar de la solvencia de su carrera. Hicieron luego dos álbumes más, A Date with The Smithereens y God Save The Smithereens dos álbumes mejores que el Blow Up pero ya era demasiado tarde, la banda hizo un descanso a partir del 2000 y hasta el 2007 no volverían a grabar, ya con una dirección más nostálgica y aprovechando la base de fans que tienen en América. Por último, lamentar la muerte de Pat DiNizio en 2017 y que le rindió homenaje (➜ AQUÍ). Smithereens, en recuerdo, con nostalgia y reivindicando las canciones, aunque no siempre lo hicieron perfecto.
