Me ha pasado algo curioso con este artículo, tenía la sensación de que se escribiría solo, pero ha sido pasar las horas y solo encuentro trabas, obstáculos y otras molestias que me llevan a la pereza. Quizás ha sido como la ambición de los políticos, que lo he querido inflar tanto que me ha desbordado. En fin. En este artículo no seré muy original y no iré a buscar el último tema guardado en el cajón del artista de turno, no. Pondré el tema que creo que toca y para eso está hecho este blog. Políticos, esa gente que te suplica tu voto y que son los máximos responsables de un territorio y de miles de vidas. No estoy para definiciones, pero la verdad, cuesta mucho encontrar en ellos a gente honesta, sincera y equitativa. Entiendo que por el trabajo que tienen que desarrollar, ser bonachón a la hora de hacer que las cosas cuadren no es nada pertinente. La música los ha fotografiado de forma muy clara y muy cercana, aunque hay gente del negocio que se ha acercado a ellos y ha salido más que escaldada, en la mayoría de las veces. Por ejemplo, aquí tenéis a Pink Floyd definiendo con imágenes y con música lo que es el discurso de un político. Acertan mucho en retratar cómo un político se acerca a la gente, cómo enardece a las masas, las inflexiones de voz durante el mitin. Obviamente, aquí han plasmado a un líder autoritario, pero revisad si queréis vosotros mismos cómo lo hacen de forma muy similar en las campañas electorales los políticos reales.
In The Flesh - Pink Floyd
Debemos agradecer a Alice Cooper por ilustrarnos fielmente lo que es un candidato político y cómo es elegido. Y aunque pone mucha broma e ironía, no está tan desencaminado cuando le llevan una carretilla llena de dinero o cuando se pasea por las calles buscando votos para su elección.
Elected - Alice Cooper
En este vídeo, aparte de toda la carga distópica que arrastra, nos muestra al político como un títere, y la realidad es similar, donde el político tiene un ejército de asesores, estrategas y gente haciendo los trabajos más básicos para el partido y para el líder.
Anthem for the Year 2000 - Silverchair
Una de las cosas que a un político le garantiza que pueda llegar lejos en su carrera es tener un punto que haga de atrayente, digamos carisma, digamos espejo donde reflejarse o el deseo de que sea como alguien cercano de la familia o de las amistades. Así tenemos el culto a la personalidad que nos exponen los Living Colour. Esto nos viene de muy dentro y de muy antiguo, cuando la gente tenía a alguien superior, digamos señor feudal, rey, obispo, abad, a quien se le dispensaba una atención que iba más allá y que ha llegado hasta nuestros días. Y la raza de políticos actual sabe de su existencia y lo ha aprovechado tanto como ha podido.
Cult Of Personality - Living Colour
He dividido este reportaje en tres partes, para no cargar el blog y que se haga muy largo. Próximamente os serviré el próximo capítulo. ¡Hasta pronto!
Vuelvo a publicar este artículo muy antiguo, porque Billy ha decidido subir el video original, que ansiaba mucho volver a encontrar y que personalmente me tocó mucho en el lejano 1997. Por si acaso decide eliminarlo, lo volveré a subir yo, porque lo habré guardado en el lugar donde están los recuerdos importantes. Os dejo con el artículo original: La huella que tiene la adolescencia es de una época feliz, llena de tópicos románticos. Pero para mí y para mucha gente también ha sido un tiempo de tristeza, de mucha inquietud, de tomar decisiones que marcan para siempre, sean acertadas o no. Ese es en parte el espíritu de la canción de Billy, una mirada hacia los primeros años en que nada es fácil.
Haciendo ensayos, reubicando piezas y trazando la fórmula
Recuerdo haber escuchado este disco de los Sonic Youth en pocas ocasiones, así que, a pesar de ello, sí que haré un ejercicio de reivindicar discos que quizás no tienen el peso en las carreras de bandas, pero sí que son frontera entre grandes trabajos. Y este es el caso, aunque algunos opinadores digan que es un disco accesible, yo soy de la opinión que tiene parte de experimental, como reza en su título. Obviamente, este trabajo no tiene el carisma del Goo, ni la rebaja de aspereza del Dirty, quizás su intento más solvente de ser un poco comerciales. Sí que encuentro que es un retomar su camino pero con la lección aprendida, haciendo una mínima concesión y seguir el camino. Así que vamos al grano. Encendien motores con "Winner's Blues" que es un tema bastante atípico en las coordenadas de los Sonic Youth, un corte relajado y suave, que lo podría tocar el mismo Sufjan Stevens, pero tampoco es nada del otro mundo, ni que haga variar la rotación de la galaxia. Y a continuación, "Bull in the Heather", el único single de este trabajo, con todas las premisas sónicas, pero sabiendo que lo utilizarán como mascarón de proa para la promo del disco.
Bull in the Heather - Sonic Youth
Para mi "Starfield Road" es la banda en su salsa, una exquisitez de descontrol, sirenas, ruido y todo lo que esperas de ellos, esa amalgama sucia y electrificada, como chapotear en un charco lleno de barro y agua podrida.
Starfield Road - Sonic Youth
La Kim nos sirve el "Screaming Skull" recordando lejanamente el "Drunken Butterfly", esa voz que pone, medio ahogándose, medio orgásmica, con una intro con el wha-wha y rodando el tema como una trituradora accionada a la máxima potencia.
Screaming Skull - Sonic Youth
"Self-Obsessed and Sexxee" una melodía más tranquila, pero no exenta de guitarras lacerantes que se te clavan como mil agujas, con ese tono único que tiene el Thurston Moore a la hora de cantar sus temas.
Self-Obsessed and Sexxee - Sonic Youth
"Waist"/"In the Mind of the Bourgeois Reader" parecen dos canciones troqueladas con el mismo patrón, con un ritmo rápido, enloquecido, que haría perder los nervios al monje budista más sereno y centrado. Y este trabajo se cierra con "Sweet Shine" cantado por la Kim y igual de parsimonioso que el corte que da inicio al álbum.
Sweet Shine - Sonic Youth
El ritmo que imprimieron los Sonic Youth a la década se acabaría redondeando publicando en 1995 el Washing Machine, 4 discos que fue lo mejor que publicaron. Ahora volvamos a recordar y a escuchar.
Donde terminan las fronteras, donde comienza el cruce de caminos
A muchos les sorprenderá que mencione uno de los discos que cimentó todo el movimiento rock latino. No niego que haya un componente de melancolía, porque por aquellos días escuché este álbum con gente muy cercana y también, una parte de mí terminó esos días, no sé si era parte de inocencia, valentía y que sentí el sabor amargo de la traición y también la pérdida, disculpad, pero soy de la opinión de que también, el arte se alimenta profundamente de las vivencias de cada uno. Por otro lado, no debemos olvidar que los Mano Negra ya eran conocidos en la parte final de los 80, incluso para la gente que venía de ambientes más alternativos, en Francia por ejemplo, su éxito fue enorme, aunque las letras en francés no fueran mayoritarias. Los hermanos Chao, estandartes de una fusión de rock "gypsy" con toques de rockabilly, reggae, western, rai y las mezclas que hicieran falta, se iniciaron con Hot Pants y luego con Los Carayos, a los que hice referencia (➜ AQUÍ) y en 1987 fundaron Mano Negra, donde cristalizaron todo el trabajo anterior, con el seminal y exitoso Patchanka y el reconocimiento internacional con el Puta's Fever, a partir de aquí todo comenzó a torcerse, con un álbum claramente dirigido al mercado anglosajón como es King of Bongo que no tuvo éxito y con una gira extenuante por América del Sur en tren de muchos meses que deja la banda rota y siendo el álbum que hoy os ilustro como testamento y también y de forma muy clara, como Manu Chao enfocaría su carrera en solitario. A destacar que este álbum deja en la mínima expresión mucho de su pasado, tanto la parte francesa, como las dinámicas más europeas y aquí claramente gana toda su experiencia en la gira sudamericana y obviamente, adquieren más relevancia las letras en castellano. Hagamos un pequeño repaso de lo que contiene este trabajo, que se inicia con "Viva Zapata", un totum revolutum de locutores de radio, proclamas, sonido de megáfono y mil cosas más, recordar que a principios de ese año se había iniciado el levantamiento zapatista en México y obviamente los Mano Negra no se supieron reprimir y lo gritan abriendo el álbum. Sigue "Casa Babylon", con un inconfundible sonido latino, con toques de rap, vientos soplando fuerte y poniendo la directa. "The Monkey", uno de los mejores cortes del disco, con ese tono rap, heredero total del "King Kong Five", es una lástima que en directo se desdibuje tanto como hace poco lo he escuchado, queda como una cosa inconclusa y grotesca, mejor os dejo como está grabado originalmente.
The Monkey - Mano Negra
Seguimos en racha con el "Señor Matanza", donde Manu nos hace un retrato muy preciso de lo que son los caciques en América del Sur, donde en sus conciertos por Colombia era habitual que se encontraran con estos personajes. Un gran tema de denuncia y que sirvió como primer sencillo.
Señor Matanza - Mano Negra
Una de las canciones más divertidas del Casa Babylon es "Santa Maradona", cantada en francés, nos recuperan los Mano Negra más humorísticos, burlándose de los seguidores deportivos y denunciando por debajo, la devoción religiosa del puto fútbol.
Santa Maradona - Mano Negra
Otra canción notable es "Bala Perdida", donde abundan los efectos y con un bajo potentísimo y toda la banda arrasando, también con alguna gota de rap.
Bala Perdida - Mano Negra
Con "Machine Gun", con un órgano somnoliento y ritmo tranquilo, nos denuncian el estado de la tierra, con un claro mensaje ecologista.
Machine Gun - Mano Negra
A partir de este punto el álbum baja de nivel, temas como "Mama Perfecta" o "El alakran", para mí son temas de relleno total, incluso prescindibles. Con "Love And Hate" vuelven a poner nervio y empuje al álbum, con esa combinación explosiva de órgano y bajo.
Love And Hate - Mano Negra
Y con "Hamburger Fields" hacen un retrato crudo de la vida rutinaria, aunque sea en medio de una tonada alegre y vital, no deja de tener un regusto amargo.
Hamburger Fields - Mano Negra
Casa Babylonfue el punto final de una gran banda como Mano Negra y que paradójicamente le dio impulso a la carrera en solitario de Manu Chao y yo creo que los temas del álbum que os he recordado le han servido de guía y modelo. La vida sigue, sí, 30 años después.
El pasado mes de febrero, tras la publicación de un tema que afirmaba que el rock había muerto, anuncié en Facebook que desde EL PROFETA ESTUDIANTE habría una respuesta, y hoy es el día. No sé cuántas veces se ha intentado matar al rock, no sé si por aburrimiento, por repulsión, por lo que representa o quién sabe por qué, pero desde luego no lo lograrán ni en sus sueños más salvajes. Yo, desde que nací en los lejanos y míticos 60, lo he escuchado toda mi vida y, naturalmente, con respeto y admiración hacia otras músicas y estilos musicales, aunque al principio no los entendiera o no me gustaran, pero que ahora, después de unos años, la mayoría de la música que escucho merece mi respeto, porque la he estudiado, la he escuchado y sé lo que cuesta componerla, interpretarla, hacerla viva y mantenerla. Lo que no es aceptable es matar de un plumazo un estilo, una corriente musical, una vertiente para escuchar. Amigos y amigas, el rock no solo ha sido unas notas en una guitarra o en una batería, el rock cambió la música, la cultura y también la forma en que se contemplaba la vida. Me pregunto, ¿merece esto morir y por qué? ¿Se imaginan a un músico de jazz proclamando a los cuatro vientos que la sardana ha muerto? ¿O que un corriente pop grite que desaparezca la música tradicional y folk? ¿O que los cantantes de ska lleven a la hoguera violines y celestas porque son productores de música clásica desfasada? Tonterías por un tubo, prejuicios a toneladas y muy poco respeto hacia músicos, melómanos y mucha gente implicada en una música que cambió el mundo, así de claro. Y desde mi altavoz, defenderé el rock, el pop, incluso estilos que personalmente no me entusiasmen, pero que merecen vivir por los siglos de los siglos. ¡SALUDOS Y ROCK AND ROLL!